La violencia política y mediática contra las mujeres en la función pública volvió a manifestarse en Formosa, generando una ola de repudio y solidaridad en redes sociales. En esta ocasión, las víctimas fueron cuatro mujeres de distintos espacios políticos, atacadas en el marco del Día Internacional de la Mujer, lo que potencia aún más la gravedad de los hechos.
Estos ataques ocurren en un año electoral, donde la disputa política se vuelve cada vez más agresiva. No es casualidad que tres de las cuatro mujeres atacadas formen parte de Valores Ciudadanos, la agrupación justicialista que responde al intendente Jorge Jofré, evidenciando que estas agresiones son parte de la campaña sucia dentro de la interna peronista.
Ataques a funcionarias y militantes
Uno de los casos más resonantes fue el de la titular de Acción Social de la Municipalidad de Formosa, Paula Cattáneo, quien sufrió una embestida mediática a través de la página “Prensa Formosa”, administrada por Evelio Ríos. Se trata de una figura ampliamente cuestionada por su falta de ética, moral y decencia, y que mantiene una estrecha relación con un alto funcionario de primera línea del gobernador Gildo Insfrán.
No es la primera vez que este espacio en redes -y quien lo respalda económicamente- es señalado por su conducta violenta hacia figuras públicas, en especial mujeres. Incluso, hubo presentaciones judiciales en un intento de frenar estos ataques, pero su responsable sigue haciendo caso omiso.
Repudio y solidaridad
El ataque contra Cattáneo no pasó desapercibido. Inmediatamente, las redes sociales se llenaron de mensajes de apoyo hacia la funcionaria y de repudio hacia la publicación y su autor.
También surgieron cuestionamientos sobre quién financia este tipo de agresiones, que parecen responder a una estrategia de difamación organizada y sistemática que se acrecienta con el arranque de la campaña electoral actual.
Pero Cattáneo no fue la única víctima. La directora de Cuestiones de Género del municipio, María Silvia Carrizo, también fue blanco de agravios por parte del mismo medio, que intentó denigrarla con comentarios sobre su supuesta orientación sexual, atacándola de manera discriminatoria e injuriosa tanto a ella como a su familia inmediata. En el mismo posteo, se mencionó a una docente universitaria y exdiputada, militante feminista y política, Lilian Bistolfi, quien también pertenece al espacio de Jofré.
Por otra parte, en otro caso, los ataques trascendieron las redes sociales y llegaron a medios oficiales. En un programa televisivo de uno de los dos canales oficiales de la provincia, la diputada provincial Gabriela Neme fue insultada en guaraní por un invitado al estudio, en un claro acto de violencia de género permitido por la producción del programa y por los directivos del canal, así como por el periodista a cargo de la conducción del espacio.
Un desafío para la democracia
Estos hechos ponen en evidencia una preocupante escalada de violencia política y mediática en la provincia, con agresiones sistemáticas hacia mujeres que ocupan cargos de decisión o tienen participación política activa. Las expresiones de repudio y solidaridad reflejan una sociedad que no está dispuesta a tolerar estos atropellos, pero también exigen respuestas concretas de la justicia y los organismos de derechos humanos para frenar este tipo de ataques.
La violencia política de género es un problema estructural que busca desalentar la participación de las mujeres en la vida pública. En este año electoral, donde las campañas sucias y la difamación parecen haberse instalado como herramientas de disputa, Formosa enfrenta el desafío de frenar estas prácticas que solo degradan la democracia.