El presidente Javier Milei afirmó que será reelecto en 2027 y adelantó que a partir de octubre su gobierno impulsará «reformas más estructurales». Además, responsabilizó a la vicepresidenta Victoria Villarruel por haber habilitado una sesión parlamentaria que, según él, derivó en una corrida cambiaria.
Durante una entrevista en el canal de streaming Neura, de la que participaron también el ministro de Economía, Luis Caputo, y el presidente del Banco Nación, Santiago Bausili, Milei se mostró confiado respecto a su futuro político:
“Estoy hablando de las secuencia de reformas que van del 2025 al 2027. Porque en el 2027 voy a ser reelecto”.
El mandatario señaló que trabaja “de manera hiperactiva con seis de los ocho ministerios” y reafirmó la centralidad del llamado “Triángulo de Hierro”, compuesto por Santiago Caputo (estratega), Karina Milei (organización política) y Guillermo Francos (vínculo con la política tradicional).
Inflación, deuda y FMI
Respecto a la situación económica, Milei sostuvo que la inflación “va a desaparecer” en 2026, al cumplirse dos años desde la implementación del esquema de emisión monetaria cero.
Sobre la deuda pública, declaró:
“Cuando asumimos, la deuda era de 500 mil millones de dólares. Subió 360 mil millones, de los cuales 60 mil los tomó Macri y el resto los kukas. Hoy es de 450 mil millones”.
El presidente remarcó que los cuestionamientos económicos responden a “intereses electorales” y ratificó el rumbo de su gestión.
Por su parte, Caputo calificó como “buenísima” la reciente revisión del acuerdo con el FMI:
“Nos encuentra sólidos, con inflación en niveles bajos y la economía creciendo”.
Críticas a Villarruel
Milei también apuntó contra la vicepresidenta Victoria Villarruel, a quien acusó de haber permitido una sesión “ilegal” en el Congreso:
“La traidora dio lugar a una sesión ilegal para que nos rompan el equilibrio fiscal. Eso generó ruido y habilitó una corrida cambiaria”.
Obra pública
En otro pasaje, el mandatario ratificó su postura de eliminar el rol del Estado en la ejecución de obras de infraestructura:
“Si la obra tiene sentido, la hace el sector privado. No tiene por qué estar el sector público. No puede ser que una obra de infraestructura sea llamada obra pública. Eso es parte del Estado benefactor, que es un parásito”.