A partir de mañana, el transporte urbano de la ciudad contará con un importante cambio: la Línea B se fusionará con la Línea D, ofreciendo un recorrido optimizado que busca responder a las demandas de los vecinos y emular el servicio que en su momento brindaba la Antigua Línea 40.
El director de Transporte municipal, Fabián Olivera, anunció que esta medida tiene como objetivo mejorar la eficiencia del sistema y ampliar la cobertura en zonas que anteriormente contaban con poca conectividad. «La fusión de estas líneas es un paso hacia adelante para cumplir con el pedido de los pasajeros, quienes solicitaban frecuentemente el regreso de la Línea 40», expresó.
La nueva Línea D contará con ocho unidades operativas y una frecuencia promedio de 17 minutos. Según Olivera, este rediseño permitirá conectar mejores diferentes puntos de la ciudad, facilitando el traslado de los vecinos. Asimismo, instó a la comunidad a tener paciencia ante los ajustes iniciales y destacó el compromiso del intendente Jorge Jofré y el equipo de transporte para seguir perfeccionando el servicio.
Además de esta fusión, el funcionario adelantó que otras líneas, como la A, también adaptarán sus recorridos para ofrecer una mayor cobertura en el futuro cercano.
Sin aumento en el boleto, pero con desafíos
En cuanto al costo del pasaje, Olivera aseguró que no se prevé un aumento inmediato, a pesar de los incrementos en los precios del combustible y los salarios del sector. Sin embargo, admitió que será complicado mantener la tarifa de 1,050 pesos hasta fin de año debido a las presiones económicas.
El funcionario resaltó que la Municipalidad otorga actualmente 40.000 boletos gratuitos mensuales para personas con discapacidad, además de los beneficios para estudiantes. «Esto es parte de un gran esfuerzo en el acceso social, donde trabajamos estrechamente con la secretaría de Acción Social, Paula Catáneo, para garantizar la inclusión en el transporte público», señaló.
Compromiso con los usuarios
Olivera concluyó afirmando que estas acciones no solo buscan mejorar la calidad del servicio, sino también fortalecer la satisfacción de los usuarios. «Con trabajo conjunto y la retroalimentación de los vecinos, esperamos construir un sistema de transporte más eficiente y sostenible», destacó.
Este cambio representa un avance significativo en la infraestructura del transporte urbano, marcando un nuevo capítulo en la búsqueda de un servicio que responda a las necesidades de todos los habitantes de la ciudad.