El Ministerio de Seguridad de la Nación confirmó que no aplicará el protocolo antipiquetes en la movilización convocada para el próximo lunes, en conmemoración del 49° aniversario del golpe cívico-militar. Se espera una manifestación pacífica, por lo que la presencia policial será reducida y el operativo se enfocará en el monitoreo y la coordinación del tránsito.
Según fuentes oficiales, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, transmitió al presidente Javier Milei que la marcha del 24 de marzo es una movilización histórica y conmemorativa, por lo que no será tratada como una protesta común. “Es un concepto completamente distinto al de piquete”, señalaron desde su entorno.
Menos presencia policial y monitoreo del tránsito
El operativo de seguridad se coordinará con el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, bajo la dirección del ministro Horacio Giménez. A diferencia de otras manifestaciones, no habrá un despliegue masivo de fuerzas de seguridad, sino que se dará prioridad a la regulación del tránsito y a la supervisión de puntos estratégicos.
La movilización partirá desde la ExEsma y se dirigirá hacia la Plaza de Mayo, lo que generará cortes y desvíos en calles del centro porteño. Si bien el Gobierno no prevé incidentes, las autoridades estarán atentas a la desconcentración, un momento en el que podrían aparecer grupos ajenos a la marcha.
“No se espera algo en concreto, porque siempre han sido pacíficas, pero vamos a estar atentos, sobre todo en la desconcentración de la Plaza de Mayo y la Casa Rosada, por si hay algún tipo de infiltrados violentos que quieran causar caos”, indicaron fuentes del Ministerio de Seguridad.
Con un esquema de seguridad basado en la prevención y el monitoreo, el Gobierno busca garantizar el desarrollo de la jornada sin incidentes, en un nuevo aniversario del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia.